La Eurocámara da 18 meses para retirarlos del mercado debido a sus efectos nocivos.ESTRASBURGO. El Parlamento Europeo aprobó ayer la directiva que prohíbe la presencia de mercurio en termómetros y otros aparatos de medición, con el fin de prevenir sus efectos nocivos sobre la salud y el medio ambiente. La norma brinda un plazo de 18 meses para que los países de la UE retiren del mercado los termómetros sanitarios o meteorológicos, los manómetros o los esfigmomanómetros -aparatos que miden la presión arterial- que contengan mercurio.
El pleno aprobó prolongar hasta dos años el plazo para eliminar los barómetros con mercurio, pero rechazó por estrecho margen de votos dos enmiendas del Partido Popular Europeo que eximían totalmente de la prohibición a estos productos.
«Es necesario evitar que cantidades de mercurio entren en el flujo de residuos, para lo cual hay que reducir la demanda de este elemento en la fabricación de productos y acelerar su sustitución», argumentó la socialista española Maruja Sornosa, ponente del Parlamento Europeo en esta materia.
En contra de lo argumentado por el PPE, Sornosa negó que la prohibición de barómetros de mercurio perjudique la competitividad de los fabricantes europeos -pequeñas empresas de Bélgica, Holanda y Reino Unido-, pues, según dijo, «hace tiempo» que están fabricando productos alternativos.
El Parlamento sí indultó en cambio el comercio de aparatos con mercurio con una antigüedad mayor de 50 años, al entender que se trata de bienes culturales. Los términos de la norma habían sido pactados previamente con el Consejo de la UE, lo que permite dar por cerrada la tramitación de la directiva.
3.600 toneladas al año
La prohibición de los aparatos con mercurio se enmarca en una estrategia de la UE para erradicar el uso industrial de este metal, cuyos efectos nocivos potenciales sobre la salud y el medioambiente son ampliamente reconocidos por la comunidad científica.
La demanda mundial de mercurio roza las 3.600 toneladas al año, de las que unas 300 toneladas corresponden a la Unión Europea. De estas últimas, unas 33 toneladas se destinan a la fabricación de aparatos de medición, y casi el 90% para termómetros médicos y domésticos, según datos de la Eurocámara.
El 16 de junio, el Parlamento Europeo aprobó otra directiva que prohíbe exportar mercurio desde la UE a países terceros al tiempo que abogó por instalar un almacén para sus residuos en Almadén (Ciudad Real), localidad que alberga la mayor mina de este metal del mundo. EFE.
Termómetro ecológico (alcohol). Foto:Viatger.